¿Es una buena idea correr en pareja?
Ya sabemos que eres un(a) ferviente amante del runnig y que por nada del mundo te perderías un entrenamiento ¿pero cuántas veces no has culpabilizado cuando te levantas pronto para ir a correr y no dedicas ese tiempo a estar con tu pareja?
¿No sería más fácil de convencerle para que te acompañe? Nosotros vemos muchas ventajas y si tú aún no lo tienes claro, aquí te damos algunas pistas.
Motivarse recíprocamente
Cuando tu otra mitad se queda en casa o hace otros planes y tú te preparas para salir a correr y hace frío y llueve, la desmotivación puede apodersrse de ti. En cambio, cuando se corre en pareja, o con amigos, el otro no te deja tirar la tolla tan fácilmente.
Compartir una actividad
La rutina diaria puede pasar factura a las parejas. Compartir una actividad deportiva puede ser la ocasión para comunicar de otra manera o simplemente disfrutar de un momento entre 2.
Divertirse
¿Por qué no hacer un run and bike? Uno coge la bici y el otro se calza las zapas. Cuando el que corre comienza a cansarse es hora de intercambiar los papeles. Ello permitirá, si el nivel de forma física es muy diferente, que la persona que comienza a correr no se sienta frustrada.
Retarse para mejorar
Sin que ello conlleve a un juego malsano, puede ser la ocasión para retarse, de manera gentil, con pequeños juegos. Salir corriendo y que el otro intente atraparte, correr en sentido contrario y ver quien llega primero a un punto... con un poco de imaginación todo es posible.
Sentirse en seguridad
¡La unión hace la fuerza! Cuando corremos nadie está totalmente protegido de una caída, un accidente, una agresión. El apoyo mutuo en este tipo de situaciones puede ser muy valioso.
Organizar un viaje con carrera incluida
Un dorsal puede ser una buena excusa para organizar un viaje en pareja y descubrir una nueva región o país. Si a la adrenalina y a las ganas de terminar una carrera le sumamos poder descubrir una nueva ciudad o cultura la experiencia puede dejarnos recuerdos muy gratos.
Sin olvidar los masajes para dos tras una larga carrera, los baños calientes o los deliciosos restaurantes ¡Todos los ingredientes para reforzar aún más los lazos existentes!
Consejos
Además de la comunicación, como en el resto de actividades de la vida en común, para que una sesión de entrenamiento funcione es importarte saber adaptarse al ritmo del otro y que cada uno pueda disfrutar sin sentirse ni superior ni aún menos una carga para el otro. Evita frases como "lo siento, yo no valgo para esto", "no me esperes ya nos vemos en casa". En el caso contrario evita igualmente ser demasiado condescendiente y no le digas a tu pareja que lo hace genial cuando ni siquiera se ha atado las zapatillas.
Si te entrenas de forma regular, 3 o 4 veces por semana, y que tu nivel es superior al de tu pareja puedes ver este entrenamiento como la ocasión de aumentar el número kilómetros en buena compañía. Tras un entrenamiento específico por la mañana una sesión de recuperación al final del día puede ser la ocasión de iniciarte a los entrenamientos bicotidianos.